Depresion estacional

Depresión estacional

LA PRIMAVERA LA SANGRE ALTERA

Llegamos a la época en que mucha gente nos comenta que nota cambios frecuentes en su estado de ánimo, están más tristes, más cansados y sin energía. En general tienen pocas ganas realizar cualquier actividad, lo probable es que esté padeciendo depresión estacional o desorden afectivo estacional.

La depresión estacional se manifiesta con una gran variedad de síntomas, los cuales incluyen: fatiga generalizada, cansancio inexplicable, cambio en la alimentación y del apetito, problemas de sueño (insomnio o sueño excesivo), aturdimiento, desesperanza, aislamiento social, pérdida de interés, disminución del deseo sexual.

Todas las personas somos sensibles a los cambios del entorno y el cambio de estación no va a pasar desapercibido en nosotros. Lo que nos ocurre a nivel biológico lo explicamos a continuación. En primavera aumenta la cantidad de luz solar y esto incide en la producción de hormonas en el cerebro. Por ejemplo, la melatonina, encargada de los patrones de sueño y estados de ánimo, disminuye; mientras que la serotonina, conocida como la hormona de la felicidad, se incrementa.

Lo normal es sentirse lleno de energía y animado, pero para quienes sufren depresión estacional, los niveles de estas hormonas se descompensan, por lo tanto aparece el efecto contrario.

El entorno también influye en nuestro estado de ánimo. Es primavera, hay colores bonitos, sale el sol, queda poco para las vacaciones….estamos casi obligados a ser felices en primavera, pero en realidad “YO” no me siento así. Esta contradicción entre lo que sentimos y lo que nos rodea puede agravar aún más este estado depresivo. Es también posible que esta época aporte recuerdos tristes sobre tiempos pasados o personas que no están. A esto hay que sumarle que acabamos de pasar unos meses de “oscuridad” y baja temperatura, en los que nuestro principal motor ha sido el cumplir nuestras obligaciones. Añadiremos una variable más a este estado…el cansancio.

La forma de trabajar con cada persona dependerá de varios factores, primero es importante conocer al paciente que tenemos delante para poder hacer una intervención ajustada e individual. Tras una primera evaluación y siempre de manera particularizada se empezará a trabajar dependiendo de la gravedad de los síntomas. No es raro que muchos psicólogos trabajen conjuntamente con médicos de cabecera ya que en ocasiones es necesario algún tipo de ayuda médica para poder avanzar. Para aquellos con síntomas leves, es recomendable tomar sol en las mañanas. Esto contribuirá a regular la secreción hormonal.

Si sientes que los síntomas interfieren de manera inusual es importante buscar apoyo cualificado, porque su bienestar es importante.

Pequeños trucos

 

  • No te quedes solo, hay que evitar aislarse. Rodéate de personas significativas, siempre ayudara a tener un estado de ánimo más positivo. Conocer tu pertenencia a un grupo hace que te sientas más valorado y reconocido.
  • Sal fuera. No a la vida sedentaria. Ésta suele tener un efecto negativo para todas las personas. No hace falta acudir a un gimnasio ni darse palizas a hacer deporte, salir a andar, nadar o bailar nos provocara una sensación de bienestar. Biológicamente se secreta más dopamina, neurotransmisor que produce una mejora anímica en las personas.
  • Importante el control del sueño. Hay que dormir lo suficiente pero no demasiado, intentaremos tener un sueño ajustado en cantidad y calidad.
  • Lo mismo ocurre con la alimentación. Hay que mantener un patrón alimenticio saludable. Comer en raciones adecuadas, ni mucho ni muy poco. Durante estos meses es más sencillo prepara comidas ligeras.
  • Prohibido automedicarse. Siempre hay que consultar a un especialista, él nos indicara cual es el tratamiento que nos ayudara mejor individualmente.

SI CREES QUE LO NECESITAS, O DUDES EN CONSULTARNOS.

AYUDAR A LAS PERSONAS A SER FELICES ES NUESTRA MEJOR LABOR.

 

MªCarmen Martín Pérez

Nº de colegiado CV12393