2.1. En algún momento de nuestras vidas todos pasamos por un estado de duelo debido al fallecimiento de un ser cercano. Puede entrar dentro de la normalidad ciertos estados por los que se pasan cuando ocurre un hecho así. Más adelante explicaré las fases por las que se pasa en un proceso de pérdida.
2.1.1 El dolor es un proceso natural por el cual aprendemos a adaptarnos a la vida sin la persona que ha faltado. Como siempre decimos en nuestro centro, todos debemos de aprender a vivir sin aquella persona que ya no está. No hay un tiempo límite de aprendizaje, sino que como cada ser es único, nuestra forma de asimilarlo también lo será. Superar el gran dolor de una pérdida no significa que uno se olvide de la persona que falleció.
2.1.2 El duelo sano consiste en encontrar la forma de recordar al ser querido y adaptarnos a nuestra vida sin su presencia. Son unos momentos duros, pero hay que ser conscientes que todos tenemos que pasarlos. Si no se supera correctamente habrá un duelo patológico.
2.2 La doctora Elisabeth Kubler-Ross describe las etapas en la aceptación de la pérdida de un ser querido en 5 etapas ordenadas según su secuencia lógica.
- 2.1: Etapa 1: Negación: Durante esta etapa inicial se genera la reacción común para todas las pérdidas. La persona niega lo sucedido y cuestiona su percepción de los acontecimientos. Generalmente se presenta acompañada de la necesidad de aislarse y a veces con sentimientos de culpa y alienación. Es un rechazo de la realidad, una defensa temporal para la persona. También suele ocurrir en personas diagnosticadas de una enfermedad grave.
- 2.2 Etapa 2: Ira La persona siente mucha impotencia ante lo sucedido. Se centra en las causas de la muerte y reacciona violentamente contra los causantes de la pérdida. Si estos no son evidentes, los refleja en otras entidades, materiales o imaginarias, o incluso en su propia persona. Lo que resulta en autodestrucción o despreocupación personal.
- 2.3 Etapa 3: Negociación: Posterior a la reacción violenta anterior, la etapa 3 involucra una racionalización de lo ocurrido y se buscan maneras de resolver la pérdida. Éstas se concretan mediante la búsqueda de asistencia, ya sea por la oración, ayuda profesional, o actividades que pueden incluir la idea de intercambiar al fenecido por buen comportamiento o sacrificios de algún tipo. Involucra la esperanza que el individuo puede cambiar o negociar la perdida mediante peticiones, ofrecer favores, hacer algunos rituales, etc.
- 2.4. Etapa 4: Depresión: Incluye un período de dolor extremo por la pérdida. Las esperanzas psicológicas flaquean y la persona comienza a entender la imposibilidad de cambiar las cosas. Los recuerdos de la persona se vuelven reiterativos. La mente comienza a buscar reminiscencias del fallecido en objetos, personas y situaciones. El deudo se aferrará incluso al dolor, llegando incluso a autoflagelarse para mantener su sufrimiento.
- 2.5: Etapa 5: Aceptación: La persona comprende de manera positiva la pérdida de su ser querido. Su dolor ya es solo en momentos y es capaz de racionalizar positivamente y pensar en el futuro. Deja lo pasado atrás y recuerda a la persona sin sentimientos hostiles.
Es completamente normal que tanto las personas que han perdido como las que son diagnosticadas con alguna enfermedad terminal pasen por estas cinco etapas.
2.3. El duelo suele durar entre 2 y 12 semanas, aunque el primer año después de la pérdida es crucial para los que se quedan. Es completamente normal acordarse de los seres perdidos en fechas señaladas o en momentos puntuales. Pero todo esto es adecuado y necesario si se hace de una forma ajustada a nuestro estilo de vida y si no llega a interrumpir las rutinas diarias de quien ha perdido a un ser querido.
2.4 Las personas que estén atravesando estas etapas no deben forzar el proceso. El proceso de duelo es altamente personal y no debe ser acelerado, ni alargado, sí que es posible tener ayuda para sobrellevarlo mejor, pero todas las personas han de cerrar bien esta etapa de sus vidas. Uno debe ser meramente consciente de que las etapas van a ser dejadas atrás y que el estado final de aceptación va a llegar.
-Si sientes que tus emociones te abruman y piensas que no puedes superarlas, no dudéis en contactar con nosotras, aquí os ayudaremos a lidiar con vuestros sentimientos y recuperar el rumbo para ser capaces de salir adelante-